Basílica de María Auxiliadora

PRESENTACIÓN

La Basílica de María Auxiliadora de Turín, obra del arquitecto Antonio Spezia, a petición de Don Bosco, es iglesia madre y centro espiritual de la obra salesiana. 

El 27 de abril de 1865 se puso la primera piedra en presencia del príncipe Amadeo de Saboya. El 9 de junio de 1868 tuvo lugar la solemne consagración.


La fachada se inspira en la iglesia de San Jorge el Mayor, en Venecia. Sobre la torre de la derecha, el arcángel Gabriel ofrece una corona a María. En la torre izquierda, el arcángel Miguel bate una bandera con la inscripción “Lepanto”.  Sobre el tímpano, las estatuas de los mártires Solutor, Adventor y Octavio que murieron en este lugar. 

Sobre el reloj se representa al primer obispo de Turín, San Máximo y a San Francisco de Sales, patrono de la Familia Salesiana.  En los nichos centrales, San José y San Luis Gonzaga.

 En el interior, el gran cuadro de María Auxiliadora, inspirado por el mismo Don Bosco que lo sugirió al pintor Tomás Lorenzone y que realizó en tres años. El resto de la decoración fue promovida por Don Rúa. 

En la Basílica hay cuatro altares además del mayor: el dedicado a Don Bosco, obra del arquitecto Cellini. El de San José, que queda como lo quiso Don Bosco, con el cuadro central de Lorenzone y que incluye una imagen del Oratorio de Valdocco en 1869. El altar de María Mazzarello, cofundadora de las Hijas de María Auxiliadora. El altar de Domingo Savio, cuyo cuadro es de Carlo Mogari.

EL MONUMENTO A DON BOSCO EN PIAZZA MARIA AUSILIATRICE

Frente a la Basílica se encuentra el monumento a San Juan Bosco hecho en bronce. 

La decisión de erigirlo la tomaron los antiguos alumnos en 1911. 

Debido al estallido de la Gran Guerra (1914-1918), la construcción se retrasó, y la inauguración no pudo hacerse hasta el 23 de mayo de 1920.